Encontrados 117 resultados para: Sábado

  • Esta es hija de Abraham, y Satanás la mantenía atada desde hace dieciocho años; ¿no se la debía desatar precisamente en día sábado?» (Evangelio según San Lucas 13, 16)

  • Un sábado Jesús fue a comer a la casa de uno de los fariseos más importantes, y ellos lo observaban. (Evangelio según San Lucas 14, 1)

  • Jesús preguntó a los maestros de la Ley y a los fariseos: «¿Está permitido por la Ley curar en día sábado o no?» (Evangelio según San Lucas 14, 3)

  • Después les dijo: «Si a uno de ustedes se le cae su burro o su buey en un pozo en día sábado, ¿acaso no va en seguida a sacarlo?» (Evangelio según San Lucas 14, 5)

  • Era el día de la Preparación de la Pascua y ya estaba para comenzar el día sábado. (Evangelio según San Lucas 23, 54)

  • Después que volvieron a sus casas, prepararon perfumes y mirra, y el sábado descansaron, según manda la Ley. (Evangelio según San Lucas 23, 56)

  • Al instante el hombre quedó sano, tomó su camilla y empezó a caminar. Pero aquel día era sábado. (Evangelio según San Juan 5, 9)

  • Por eso los judíos dijeron al que acababa de ser curado: «Hoy es día sábado, y la Ley no permite que lleves tu camilla a cuestas.» (Evangelio según San Juan 5, 10)

  • Por eso los judíos perseguían a Jesús, porque hacía tales curaciones en día sábado. (Evangelio según San Juan 5, 16)

  • Y los judíos tenían más ganas todavía de matarle, porque además de quebrantar la ley del sábado, se hacía a sí mismo igual a Dios, al llamarlo su propio Padre. (Evangelio según San Juan 5, 18)

  • Pero miren: Moisés les ha dado la circuncisión (aunque en realidad no viene de Moisés sino de los patriarcas) y ustedes hacen la circuncisión incluso en día sábado. (Evangelio según San Juan 7, 22)

  • Un hombre debe recibir la circuncisión, aunque sea sábado, para no quebrantar la ley de Moisés; entonces, ¿por qué se enojan conmigo porque he salvado al hombre entero en día sábado? (Evangelio según San Juan 7, 23)


“Cada Missa lhe obtém um grau mais alto de gloria no Céu!” São Padre Pio de Pietrelcina