24. Pero Dios se acercó a Labán el arameo en un sueño, y le dijo: «Cuídate de no discutir con Jacob, bien sea con amenazas o sin violencia.»





“É necessário manter o coração aberto para o Céu e aguardar, de lá, o celeste orvalho.” São Padre Pio de Pietrelcina