21. Abrahán, nuestro padre, ¿no fue reconocido justo por sus obras, cuando ofreció a su hijo Isaac sobre el altar?





“Não se desencoraje, pois, se na alma existe o contínuo esforço de melhorar, no final o Senhor a premia fazendo nela florir, de repente, todas as virtudes como num jardim florido.” São Padre Pio de Pietrelcina