Carta a los Filipenses, 4
1. Por eso, hermanos míos, a quienes tanto quiero y echo de menos, que son mi alegría y mi corona, sigan así firmes en el Señor, amadísimos.
1. Por eso, hermanos míos, a quienes tanto quiero y echo de menos, que son mi alegría y mi corona, sigan así firmes en el Señor, amadísimos.
“O Senhor sempre orienta e chama; mas não se quer segui-lo e responder-lhe, pois só se vê os próprios interesses. Às vezes, pelo fato de se ouvir sempre a Sua voz, ninguém mais se apercebe dela; mas o Senhor ilumina e chama. São os homens que se colocam na posição de não conseguir mais escutar.” São Padre Pio de Pietrelcina