7. Y esto ocurría todos los años cada vez que subía a la Casa de Yavé; la otra la molestaba y ella se ponía a llorar y no quería comer.





“Não se desencoraje se você precisa trabalhar muito para colher pouco. Se você pensasse em quanto uma só alma custou a Jesus, você nunca reclamaria!” São Padre Pio de Pietrelcina