8. Le respondió: "El corazón y el hígado del pez se queman delante de un hombre o mujer atormentados por el demonio o por un espíritu maligno, y el tormento desaparece para siempre.





“Apóie-se, como faz Nossa Senhora, à cruz de Jesus e nunca lhe faltará conforto”. São Padre Pio de Pietrelcina