15. Si tú, Israel, te prostituyes, que al menos Judá no se haga culpable. Por tanto, no vayáis a Guilgal, no subáis a Bet-Avén, no juréis más así: "Vive Dios".





“Apóie-se, como faz Nossa Senhora, à cruz de Jesus e nunca lhe faltará conforto”. São Padre Pio de Pietrelcina