7. ¡No se avergüencen por mí los que en ti esperan, oh Yahveh Sebaot! ¡No sufran confusión por mí los que te buscan, oh Dios de Israel!





“Seja grato e beije docemente a mão de Deus. É sempre a mão de um pai que pune porque lhe quer bem” São Padre Pio de Pietrelcina