Ester, 14
18. Que no tuvo tu sierva instante de alegría, desde su encumbramiento hasta el día de hoy, sino sólo en ti, Señor y Dios de Abraham.
18. Que no tuvo tu sierva instante de alegría, desde su encumbramiento hasta el día de hoy, sino sólo en ti, Señor y Dios de Abraham.
“As almas! As almas! Se alguém soubesse o preço que custam”. São Padre Pio de Pietrelcina