1. El Señor me dijo:

2. "Hijo de hombre, vuelve tu rostro hacia la montaña de Seír y profetiza contra ella.

3. Dirás: Esto dice el Señor: Aquí estoy contra ti, montaña de Seír; extenderé mi mano contra ti y te reduciré a un desierto desolado;

4. convertiré en ruinas tus ciudades, quedarás hecha una desolación y sabrás que yo soy el Señor.

5. Porque has alimentado un odio secular y has entregado a la espada a los israelitas el día de su último crimen,

6. por mi vida, dice el Señor, que te llenaré de sangre y la sangre te perseguirá.

7. Haré de los montes de Seír una desolación, un desierto, y extirparé de allí a todo el que circula.

8. Llenaré de muertos sus montañas. En sus collados, en sus valles, en todos sus barrancos caerán los muertos a espada.

9. A desolación eterna te reduciré, no serán ya habitadas tus ciudades y sabréis que yo soy el Señor.

10. Por haber dicho: Las dos naciones, los dos países son míos; los poseeremos en herencia aunque esté allí el Señor,

11. por mi vida, dice el Señor Dios, que procederé contigo con arreglo al furor y a la pasión que tú has mostrado en tu odio contra ellos, y me manifestaré en medio de ellos cuando te juzgue.

12. Y sabrás que yo, el Señor, he oído todos los ultrajes que lanzabas contra los montes de Israel cuando decías: Están devastados, nos han sido dados como presa.

13. Me habéis desafiado con vuestra boca y habéis acumulado contra mí vuestras palabras: Yo lo he oído.

14. Y ahora esto dice el Señor Dios: Mientras toda la tierra se alegra, yo haré de ti una desolación.

15. Como tú te alegraste cuando la heredad de la casa de Israel era devastada, así haré yo contigo; en desolación te convertirás, monte de Seír, así como Edón entero, y se sabrá que yo soy el Señor.





“O Senhor nos dá tantas graças e nós pensamos que tocamos o céu com um dedo. Não sabemos, no entanto, que para crescer precisamos de pão duro, das cruzes, das humilhações, das provações e das contradições.” São Padre Pio de Pietrelcina