7. Y él ordenó a sus guardias personales que no se lo impidieran. Así permaneció Judit tres días en el campamento; cada noche salía al valle de Betulia y se bañaba en la fuente que estaba en el campamento.





“Rezai e continuai a rezar para não ficardes entorpecidos”. São Padre Pio de Pietrelcina