32. Por eso, así habla el Señor acerca del rey de Asiria: Él no entrará en esta ciudad, ni le lanzará una flecha; no la enfrentará con el escudo, ni levantará contra ella un terraplén.





“Quanto mais te deixares enraizar na santa humildade, tanto mais íntima será a comunicação da tua alma com Deus”. São Padre Pio de Pietrelcina