12. Todos unánimemente cumplieron la orden y suplicaron al Señor misericordioso con lamentaciones, ayunos y postraciones, durante tres días seguidos. Entonces Judas los arengó, animándolos a estar preparados.





“Não se fixe voluntariamente naquilo que o inimigo da alma lhe apresenta.” São Padre Pio de Pietrelcina