Encontrados 612 resultados para: respondió

  • La mujer respondió a la serpiente: "Nosotros podemos comer del fruto de los árboles del jardín. (Génesis 3, 2)

  • Y éste respondió: "Oí tus pasos por el jardín, me entró miedo porque estaba desnudo, y me escondí". (Génesis 3, 10)

  • El hombre respondió: "La mujer que me diste por compañera me dio del árbol y comí". (Génesis 3, 12)

  • El Señor Dios dijo a la mujer: "¿Qué es lo que has hecho?". Y la mujer respondió: "La serpiente me engañó y comí". (Génesis 3, 13)

  • El Señor preguntó a Caín: "¿Dónde está tu hermano?", y él respondió: "No lo sé. ¿Es que soy yo el guardián de mi hermano?". (Génesis 4, 9)

  • Abrán le respondió: "Juro, mano en alto, al Señor que creó el cielo y la tierra: Yo no tomaré nada de lo que es tuyo, (Génesis 14, 22)

  • Abrán respondió: "Señor Dios, ¿qué me vas a dar? Yo estoy ya para morir sin hijos, y el heredero de mi casa será ese Eliezer de Damasco. (Génesis 15, 2)

  • Abrán respondió a Saray: "Mira, tu esclava está en tus manos; haz con ella lo que mejor te parezca". Saray la maltrató, y ella se escapó. (Génesis 16, 6)

  • y le dijo: "Agar, esclava de Saray, ¿de dónde vienes y adónde vas?". Ella respondió: "Huyo de la presencia de Saray, mi señora". (Génesis 16, 8)

  • Ellos le preguntaron: "¿Dónde está Sara, tu mujer?". Él respondió: "Está en la tienda". (Génesis 18, 9)

  • El Señor respondió: "Si encuentro en Sodoma cincuenta justos dentro de la ciudad, perdonaré a toda la ciudad en consideración a ellos". (Génesis 18, 26)

  • A lo mejor faltan cinco para los cincuenta justos; ¿destruirás por esos cinco toda la ciudad?". Y él respondió: "No, no la destruiré si encuentro cuarenta y cinco justos". (Génesis 18, 28)


“Não queremos aceitar o fato de que o sofrimento é necessário para nossa alma e de que a cruz deve ser o nosso pão cotidiano. Assim como o corpo precisa ser nutrido, também a alma precisa da cruz, dia a dia, para purificá-la e desapegá-la das coisas terrenas. Não queremos entender que Deus não quer e não pode salvar-nos nem santificar-nos sem a cruz. Quanto mais Ele chama uma alma a Si, mais a santifica por meio da cruz.” São Padre Pio de Pietrelcina