Encontrados 15 resultados para: jinete

  • Dan será serpiente en el camino, como víbora junto al sendero, que muerde los talones del caballo y hace caer por detrás al jinete. (Génesis 49, 17)

  • El centinela que estaba sobre la torre de Yezrael vio venir la tropa de Jehú y dijo: "Diviso una tropa". Jorán ordenó: "Toma un jinete y mándalo a su encuentro, y que pregunte si vienen en son de paz". (II Reyes 9, 17)

  • El jinete fue a su encuentro y dijo: "El rey pregunta si venís en son de paz". Jehú respondió: "¿Qué te importa a ti la paz? Ponte a mi retaguardia". Y el centinela notificó: "El emisario ha llegado hasta ellos, pero no vuelve". (II Reyes 9, 18)

  • Jorán envió entonces un segundo jinete, el cual llegó y les dijo: "El rey pregunta si venís en son de paz". Pero Jehú replicó: "¿Qué te importa a ti la paz? Ponte a mi retaguardia". (II Reyes 9, 19)

  • Pero al llegar los cazadores se remonta, y se ríe del caballo y su jinete. (Job 39, 18)

  • Se les apareció un caballo adornado de riquísima montura y, sobre él, un jinete terrible. El caballo pateó con sus patas delanteras a Heliodoro; el que lo montaba iba armado con armadura de oro. (II Macabeos 3, 25)

  • Cerca todavía de Jerusalén, mientras todos marchaban con ánimo igualmente decidido, se vio a la cabeza de ellos un jinete vestido de blanco, con armadura de oro, que hacía vibrar su lanza. (II Macabeos 11, 8)

  • Elán ha tomado la aljaba, el jinete ha montado en los caballos y Quir ha sacado el escudo. (Isaías 22, 6)

  • el que maneja el arco no resistirá, el veloz no escapará y el jinete no salvará su vida; (Amós 2, 15)

  • "Tuve un sueño durante la noche. Vi un jinete sobre un caballo rojo, que estaba entre los mirtos que había en un valle profundo; detrás de él había caballos rojos, alazanes, negros y blancos. (Zacarías 1, 8)

  • Vi aparecer un caballo blanco; el jinete tenía arco, se le dio una corona y salió como vencedor y para vencer. (Apocalipsis 6, 2)

  • Y salió otro caballo rojo; a su jinete se le dio poder para quitar la paz de la tierra y hacer que los hombres se mataran unos a otros, y se le dio una gran espada. (Apocalipsis 6, 4)


“Que Jesus o aperte sempre mais ao Seu divino coração. Que Ele o alivie no sofrimento e lhe dê o abraço final no Paraíso.” São Padre Pio de Pietrelcina