Encontrados 101 resultados para: embargo

  • Al día siguiente, Moisés dijo al pueblo: "Habéis cometido un gran pecado. Sin embargo, yo voy a subir al Señor; quizá alcance perdón para vuestro pecado". (Exodo 32, 30)

  • Sin embargo, las fuentes, las cisternas y los embalses de agua permanecerán puros; pero el que toque el cuerpo muerto será impuro. (Levítico 11, 36)

  • Sin embargo, se obstinaron en subir a la cima de la montaña; pero el arca de la alianza del Señor y Moisés no se movieron de en medio del campamento. (Números 14, 44)

  • Sin embargo, la partición de la tierra se hará por suertes. Se hará la repartición según los nombres de las tribus patriarcales; (Números 26, 55)

  • Sin embargo, ninguno de vosotros confió en el Señor, vuestro Dios, (Deuteronomio 1, 32)

  • A vosotros, sin embargo, os tomó el Señor y os sacó del horno de Egipto para que fueseis el pueblo de su herencia hasta hoy. (Deuteronomio 4, 20)

  • Sin embargo, sólo se unió con tus padres, y esto por amor; y después de ellos eligió a sus descendientes, vosotros mismos, entre todas las naciones, hasta el día de hoy. (Deuteronomio 10, 15)

  • de lo contrario, el vengador del homicida lo perseguirá y, si el camino fuese largo, lo alcanzaría y le daría muerte. Y, sin embargo, ese hombre no merecía la muerte, pues nunca había odiado a su víctima. (Deuteronomio 19, 6)

  • Sin embargo, Israel no quemó ninguna de las ciudades en ruinas edificadas sobre las colinas, a excepción de Jasor, que fue incendiada por Josué. (Josué 11, 13)

  • Sin embargo, los de la tribu de Benjamín no pudieron echar de Jerusalén a los jebuseos, que han continuado viviendo allí hasta el día de hoy con los de Benjamín. (Jueces 1, 21)

  • Sin embargo, cuando visteis que Najás, rey de los amonitas, venía contra vosotros, me dijisteis: No, que reine un rey sobre nosotros, siendo así que el Señor, vuestro Dios, es vuestro rey. (I Samuel 12, 12)

  • Jusay dijo a los sacerdotes Sadoc y Abiatar: "Ajitófel ha dado tal y tal consejo a Absalón y a los ancianos de Israel; yo, sin embargo, les he dado este otro. (II Samuel 17, 15)


“Não sejamos mesquinhos com Deus que tanto nos enriquece.” São Padre Pio de Pietrelcina