Encontrados 15 resultados para: devastado

  • Cuando David y sus hombres llegaron al tercer día a Sicelag, los amalecitas habían hecho una incursión contra el Negueb y contra Sicelag. Habían devastado Sicelag y le habían prendido fuego. (I Samuel 30, 1)

  • para desembarcar en el país y vengarme de los que han devastado y asolado muchas ciudades de mi reino. (I Macabeos 15, 4)

  • Habéis devastado su territorio, habéis hecho daño al país y os habéis apoderado de muchas ciudades de mi reino. (I Macabeos 15, 29)

  • Entra en juicio el Señor con los ancianos y los jefes de su pueblo: Vosotros habéis devastado la viña, guardáis en casa lo robado al pobre. (Isaías 3, 14)

  • Pues antes que el niño sepa rechazar el mal y elegir el bien será devastado el país de esos dos reyes ante los que tiemblas tú. (Isaías 7, 16)

  • ¡Ay de ti, devastador, que no has sido devastado; ay de ti, saqueador, que aún no has sido saqueado! Cuando termines de devastar, serás tú devastado; cuando termines de saquear, serás saqueado. (Isaías 33, 1)

  • Sí, así habla el Señor: Todo el país será devastado, yo llevaré a cabo un total exterminio. (Jeremías 4, 27)

  • Derrama tu furor sobre las naciones que no te conocen, sobre los pueblos que tu nombre no invocan, porque han devorado a Jacob, lo han consumido y han devastado su morada. (Jeremías 10, 25)

  • Numerosos pastores han devastado mi viña, han pisoteado mi tierra, han convertido mi campo tan querido en un desierto desolado. (Jeremías 12, 10)

  • Sobre Moab. Esto dice el Señor todopoderoso, Dios de Israel: ¡Ay de Neb, que ha sido devastado! ¡Cubierta de vergüenza Quiriat Yearín, que ha sido tomada, avergonzada, en ruinas, la ciudadela! (Jeremías 48, 1)

  • Invadirá el devastador toda ciudad, sin que se escape una sola; el valle será devastado, saqueada la llanura, como ha dicho el Señor. (Jeremías 48, 8)

  • El Señor ha actuado como enemigo, ha devastado a Israel; ha destruido todos sus palacios, ha arrasado sus fortalezas, ha multiplicado en la hija de Judá gemidos y gemidos. (Lamentaciones 2, 5)


“Apóie-se, como faz Nossa Senhora, à cruz de Jesus e nunca lhe faltará conforto”. São Padre Pio de Pietrelcina