Encontrados 44 resultados para: buey

  • No desearás la casa de tu prójimo, ni su mujer, ni su siervo, ni su sierva, ni su buey, ni su asno, ni cosa alguna que a él le pertenezca". (Exodo 20, 17)

  • Si un buey acornea a un hombre o a una mujer y mueren, el buey será sacrificado y su carne no se podrá comer, pero su amo será absuelto. (Exodo 21, 28)

  • Pero si ya antes el buey acorneaba, y el amo, sabiéndolo, no lo encerró, y el buey mata a un hombre o a una mujer, el buey será matado a pedradas, lo mismo que el dueño. (Exodo 21, 29)

  • Si el buey acornea a un niño o a una niña, le será también aplicada esta ley. (Exodo 21, 31)

  • Si el buey acornea a un esclavo o a una esclava, el amo del buey pagará treinta monedas de plata al dueño del esclavo o de la esclava, y el buey será matado a pedradas. (Exodo 21, 32)

  • Si uno deja una cisterna abierta, o la cava y no la cubre, y un buey o un asno cae dentro, (Exodo 21, 33)

  • el dueño de la cisterna reparará los daños, pagará en dinero al dueño del buey o del asno, y el animal muerto será suyo. (Exodo 21, 34)

  • Si el buey de uno acornea al buey de otro y éste muere, venderán el buey vivo, partiéndose el importe, y se repartirán igualmente el buey muerto. (Exodo 21, 35)

  • Pero si era notorio que ya el buey solía acornear, restituirá buey por buey y el buey muerto será suyo. (Exodo 21, 36)

  • Si alguno roba un buey o una oveja y los mata o vende, restituirá cinco bueyes por cada buey y cuatro ovejas por cada oveja. (Exodo 21, 37)

  • Si se le encuentra vivo en casa lo robado, buey, asno o cordero, restituirá el doble. (Exodo 22, 3)

  • En toda apropiación indebida, sea de buey, de asno, de oveja, de vestido o de cualquier cosa desaparecida, si alguien lo reclama como suyo, la causa de las dos partes se llevará ante Dios. Aquel a quien Dios condene, restituirá el doble a su prójimo. (Exodo 22, 8)


“Não há nada mais inaceitável do que uma mulher caprichosa, frívola e arrogante, especialmente se é casada. Uma esposa cristã deve ser uma mulher de profunda piedade em relação a Deus, um anjo de paz na família, digna e agradável em relação ao próximo.” São Padre Pio de Pietrelcina