Encontrados 16 resultados para: volveréis
Pero dijiste a tus siervos: "Pues si no baja vuestro hermano menor con vosotros, no volveréis a verme la cara." (Génesis 44, 23)
Contestó Moisés al pueblo: «No temáis; estad firmes, y veréis la salvación que Yahveh os otorgará en este día, pues los egipcios que ahora veis, no los volveréis a ver nunca jamás. (Exodo 14, 13)
hasta que Yahveh conceda reposo a vuestros hermanos, como a vosotros, y ellos también hayan tomado posesión de la tierra que Yahveh vuestro Dios les ha dado al otro lado del Jordán; entonces volveréis cada uno a la heredad que yo os he dado.» (Deuteronomio 3, 20)
Pero no ha de tener muchos caballos, ni hará volver al pueblo a Egipto para aumentar su caballería, porque Yahveh os ha dicho: «No volveréis a ir jamás por ese camino.» (Deuteronomio 17, 16)
hasta que Yahveh conceda descanso a vuestros hermanos igual que a vosotros, y también ellos tomen posesión de la tierra que Yahveh vuestro Dios les da. Entonces volveréis al país que os pertenece, el que os dio Moisés, siervo de Yahveh, al lado oriental del Jordán.» (Josué 1, 15)
Se lo comunicaron a David y envió gente a su encuentro porque los hombres estaban cubiertos de vergüenza; el rey les mandó a decir: «Quedaos en Jericó hasta que os crezca la barba; después volveréis.» (II Samuel 10, 5)
Fueron a avisar a David lo de estos hombres; y él envió gente a su encuentro, porque los hombres estaban cubiertos de vergüenza. El rey les dijo: «Quedaos en Jericó hasta que os crezca la barba y después volveréis.» (I Crónicas 19, 5)
Yo había dicho: «Sí, te tendré como a un hijo y te daré una tierra espléndida, flor de las heredades de las naciones.» Y añadí: «Padre me llamaréis y de mi seguimiento no os volveréis.» (Jeremías 3, 19)
diciendo: Ea, volveos cada cual de su mal camino y de sus malas acciones, y volveréis al solar que os dio Yahveh a vosotros y a vuestros padres, desde siempre hasta siempre. (Jeremías 25, 5)
Entonces vosotros volveréis a distinguir entre el justo y el impío, entre quien sirve a Dios y quien no le sirve. (Malaquías 3, 18)
Porque os digo que ya no me volveréis a ver hasta que digáis: ¡Bendito el que viene en nombre del Señor!» (Mateo 23, 39)
Pues bien, se os va a dejar vuestra casa. Os digo que no me volveréis a ver hasta que llegue el día en que digáis: ¡Bendito el que viene en nombre del Señor!» (Lucas 13, 35)
