Encontrados 13 resultados para: consagradas

  • Hará la expiación el sacerdote ungido y de manos consagradas para ejercer el sacerdocio como sucesor de su padre: él se vestirá las vestiduras de lino, las vestiduras sagradas, (Levítico 16, 32)

  • Estos eran los nombres de los hijos de Aarón, que fueron ungidos sacerdotes, y cuyas manos fueron consagradas para ejercer el sacerdocio. (Números 3, 3)

  • No tendréis que cargar por ello con ningún pecado, pues antes habéis reservado lo mejor: así no profanaréis las cosas consagradas por los israelitas y no moriréis.» (Números 18, 32)

  • Porque de Yahveh provenía el endurecer su corazón para combatir a Israel, para ser así consagradas al anatema sin remisión y para ser exterminadas, como había mandado Yahveh a Moisés. (Josué 11, 20)

  • Llevó a la Casa de Yahveh las ofrendas consagradas por su padre y sus propias ofrendas, plata, oro y utensilios. (I Reyes 15, 15)

  • Llevó a la Casa de Dios las ofrendas consagradas por su padre y sus propias ofrendas: plata, oro y utensilios. (II Crónicas 15, 18)

  • Pues la impía Atalía y sus hijos habían arruinado la Casa de Dios, llegando incluso a emplear para los Baales todas las cosas consagradas a la Casa de Yahveh. (II Crónicas 24, 7)

  • Los hijos de Israel y de Judá que habitaban en las ciudades de Judá trajeron también el diezmo del ganado mayor y menor y el diezmo de las cosas sagradas consagradas a Yahveh, su Dios, y lo distribuyeron por montones. (II Crónicas 31, 6)

  • y metieron allí en lugar seguro las ofrendas reservadas, los diezmos y las cosas consagradas. El levita Konanías fue nombrado intendente, y Simí, hermano suyo, era el segundo. (II Crónicas 31, 12)

  • después, ofrecieron el holocausto perpetuo y los de los sábados, novilunios y todas las solemnidades consagradas a Yahveh, además de lo que cada uno quería ofrecer voluntariamente a Yahveh. (Esdras 3, 5)

  • como un rebaño de reses consagradas, como el rebaño reunido en Jerusalén, en las fiestas solemnes. Así se llenarán de un rebaño humano vuestras ciudades en ruinas, y se sabrá que yo soy Yahveh. (Ezequiel 36, 38)

  • no visitaré yo a vuestras hijas porque se prostituyan ni a vuestras nueras porque cometan adulterio, pues que ellos también se retiran con esas prostitutas y sacrifican con las consagradas a la prostitución; ¡y el pueblo, insensato, se pierde! (Oseas 4, 14)


“O passado não conta mais para o Senhor. O que conta é o presente e estar atento e pronto para reparar o que foi feito.” São Padre Pio de Pietrelcina