Encontrados 45 resultados para: provincia

  • Estas son las personas de la provincia que regresaron de la cautividad en el exilio, y que volvieron a Jerusalén y a Judá, cada uno a su ciudad, después de haber sido deportadas a Babilonia por el rey Nabucodonosor. (Esdras 2, 1)

  • Sepa el rey que hemos ido a la provincia de Judá, a la Casa del gran Dios. Se la está reconstruyendo con bloques de piedra, y sus muros son revestidos de madera. El trabajo se hace con mucho empeño y adelanta rápidamente. (Esdras 5, 8)

  • y se encontró en Ecbátana, la fortaleza situada en la provincia de los medos, un rollo redactado en estos términos: "Memorándum: (Esdras 6, 2)

  • lo mismo que toda la plata y el oro que recojas en toda la provincia de Babilonia, con las ofrendas voluntarias hechas por el pueblo y los sacerdotes para la Casa de su Dios que está en Jerusalén. (Esdras 7, 16)

  • Ellos me respondieron: "Los que han sobrevivido al cautiverio, allá en la provincia, soportan muchas penurias y humillaciones. Las murallas de Jerusalén están en ruinas y sus puertas han sido incendiadas". (Nehemías 1, 3)

  • Junto a ellos trabajaron Melatías de Gabaón y Iadón de Meronot, como así también los hombres de Gabaón y de Mispá, por cuenta del gobernador de la provincia que está a este lado del Éufrates. (Nehemías 3, 7)

  • Estas son las personas de la provincia que volvieron de la cautividad y del exilio. Después de haber sido deportadas por Nabucodonosor, rey de Babilonia, volvieron a Jerusalén y a Judá, cada cual a su ciudad. (Nehemías 7, 6)

  • Estos son los jefes de la provincia que se establecieron en Jerusalén, y en las otras ciudades de Judá. Así, todo Israel, los sacerdotes, los levitas, los empleados del Templo y los hijos de los servidores de Salomón, vivían en sus respectivas ciudades, cada uno en su propiedad. (Nehemías 11, 3)

  • en el tercer año de su reinado, ofreció un banquete a todos sus oficiales y servidores. Los jefes del ejército de los persas y de los medos, los nobles y los gobernadores de provincia se reunieron en su presencia. (Ester 1, 3)

  • envió cartas a todas sus provincias, a cada provincia en su propia escritura y a cada pueblo en su propia lengua, ordenando que el marido fuera señor en su casa y que en ella se hablara el idioma del marido. (Ester 1, 22)

  • Los secretarios del rey fueron convocados el día trece del primer mes. Y tal como lo había ordenado Amán, se redactó un escrito dirigido a los prefectos reales, a los gobernadores de cada una de las provincias y a los jefes de cada pueblo, a cada provincia en su propia escritura y a cada pueblo en su propia lengua. Los escritos estaban redactados en nombre del rey Asuero y sellados con el anillo real. (Ester 3, 12)

  • Una copia del escrito sería promulgada con fuerza de ley en cada provincia y comunicada a todos los pueblos, a fin de que estuvieran preparados para aquel día. (Ester 3, 14)


“Esforce-se, mesmo se for um pouco, mas sempre…” São Padre Pio de Pietrelcina