Encontrados 18 resultados para: perseguidores

  • Entonces unos hombres salieron a perseguirlos en dirección al Jordán, hacia los vados; e inmediatamente después que los perseguidores salieron detrás de ellos, se cerraron las puertas de la ciudad. (Josué 2, 7)

  • Y les hizo esta recomendación: "Vayan hacia la montaña para que sus perseguidores no puedan alcanzarlos. Manténganse ocultos allí durante tres días, hasta que ellos estén de regreso, y después podrán seguir viaje". (Josué 2, 16)

  • Los hombres se fueron a la montaña y se quedaron allí tres días, hasta que regresaron los perseguidores, que los habían buscado por todas partes sin encontrarlos. (Josué 2, 22)

  • Cuando los hombres de Ai volvieron la vista hacia atrás y vieron la humareda que subía de la ciudad hacia el cielo, ya no pudieron escapar ni por un lado ni por el otro, porque la gente que huía hacia el desierto se volvió contra sus perseguidores. (Josué 8, 20)

  • Cuando el Señor les suscitaba jueces, estaba con el juez y los salvaba de las manos de sus enemigos mientras vivía el juez, porque se compadecía de los gemidos que les provocaban sus opresores y perseguidores. (Jueces 2, 18)

  • Abriste ante ellos el mar, y ellos lo cruzaron sin mojarse los pies; pero a sus perseguidores los hundiste en el abismo, como una piedra en las aguas caudalosas. (Nehemías 9, 11)

  • Porque el Señor es un Dios que pone fin a las guerras: él estableció su campamento en medio del pueblo y me libró de mis perseguidores. (Judit 16, 2)

  • empuña la lanza y la jabalina para enfrentar a mis perseguidores; dime: "Yo soy tu salvación". (Salmos 35, 3)

  • ¿Cuántos serán los días de mi vida? ¿Cuándo juzgarás a mis perseguidores? (Salmos 119, 84)

  • Atiende a mi clamor, porque estoy en la miseria; líbrame de mis perseguidores, porque son más fuertes que yo. (Salmos 142, 7)

  • Sus perseguidores, viendo que estaban resueltos a jugarse la vida, emprendieron la retirada. (I Macabeos 12, 51)

  • Ustedes dijeron:"¡No, huiremos a caballo!". Está bien, tendrán que huir. "¡Cabalgaremos velozmente!". Está bien, sus perseguidores serán más veloces. (Isaías 30, 16)


“Não sejamos mesquinhos com Deus que tanto nos enriquece.” São Padre Pio de Pietrelcina