Encontrados 12 resultados para: dominar

  • Al ver que no podía dominar a Jacob, lo golpeó en la articulación del fémur, y el fémur de Jacob se dislocó mientras luchaban. (Génesis 32, 26)

  • Hubo en Jerusalén reyes poderosos que llegaron a dominar toda la región que está del otro lado del Éufrates, y a los cuales se pagaban impuestos, contribuciones y derechos de peaje. (Esdras 4, 20)

  • Mis pensamientos me obligan a replicar, porque no puedo dominar mi excitación. (Job 20, 2)

  • Si ellos no se hubieran dejado dominar por tantos pecados, también Antíoco habría sido golpeado y hecho desistir de su atrevimiento apenas ingresó en el Santuario, como lo había sido Heliodoro cuando fue enviado por el rey Seleuco para inspeccionar el Tesoro. (II Macabeos 5, 18)

  • y le dio la fuerza para dominar todas las cosas. (Sabiduría 10, 2)

  • el más humilde de los reinos, y Egipto ya no se levantará por encima de las naciones. Yo mismo lo haré pequeño, para que no pueda dominar a las naciones. (Ezequiel 29, 15)

  • él ha puesto en tus manos a los hombres, los animales del campo y las aves del cielo, cualquiera sea el lugar donde habitan, y te ha hecho dominar sobre todos ellos: por eso la cabeza de oro eres tú. (Daniel 2, 38)

  • «Todo me está permitido», pero no todo es conveniente. «Todo me está permitido», pero no me dejaré dominar por nada. (I Corintios 6, 12)

  • porque todos faltamos de muchas maneras. Si alguien no falta con palabras es un hombre perfecto, porque es capaz de dominar toda su pesona. (Santiago 3, 2)

  • Por el contrario, nadie puede dominar la lengua, que es un flagelo siempre activo y lleno de veneno mortal. (Santiago 3, 8)

  • no pretendiendo dominar a los que les han sido encomendados, sino siendo de corazón ejemplo para el Rebaño. (I Pedro 5, 3)

  • En efecto, si alguien se aleja de los vicios del mundo, por medio del conocimiento del Señor y Salvador Jesucristo, y después se deja enredar y dominar de nuevo por esos vicios, su estado final llega a ser peor que el primero. (II Pedro 2, 20)


“Para que se preocupar com o caminho pelo qual Jesus quer que você chegue à pátria celeste – pelo deserto ou pelo campo – quando tanto por um como por outro se chegará da mesma forma à beatitude eterna?” São Padre Pio de Pietrelcina