Encontrados 237 resultados para: comer

  • Y el Señor Dios hizo brotar del suelo toda clase de árboles, que eran atrayentes para la vista y apetitosos para comer; hizo brotar el árbol de la vida en medio del jardín, y el árbol del conocimiento del bien y del mal. (Génesis 2, 9)

  • Y le dio esta orden: "Puedes comer de todos los árboles que hay en el jardín, (Génesis 2, 16)

  • exceptuando únicamente el árbol del conocimiento del bien y del mal. De él no deberás comer, porque el día que lo hagas quedarás sujeto a la muerte". (Génesis 2, 17)

  • La mujer le respondió: "Podemos comer los frutos de todos los árboles del jardín. (Génesis 3, 2)

  • Cuando la mujer vio que el árbol era apetitoso para comer, agradable a la vista y deseable para adquirir discernimiento, tomó de su fruto y comió; luego se lo dio a su marido, que estaba con ella, y él también comió. (Génesis 3, 6)

  • Sólo se abstendrán de comer la carne con su vida, es decir, con su sangre. (Génesis 9, 4)

  • Pero cuando le sirvieron de comer, el hombre dijo: "No voy a comer, si antes no expongo el asunto que traigo entre manos". "Habla", le respondió Labán. (Génesis 24, 33)

  • Esaú dijo a Jacob: "Déjame comer un poco de esa comida rojiza, porque estoy extenuado". Fue por eso que se dio a Esaú el nombre de Edóm. (Génesis 25, 30)

  • "Entonces sírveme, continuó diciendo Isaac, y déjame comer lo que has cazado, para que pueda darte mi bendición". Jacob le acercó la comida, y su padre la comió; también le sirvió vino, y lo bebió. (Génesis 27, 25)

  • Luego Jacob hizo este voto: "Si Dios me acompaña y me protege durante el viaje que estoy realizando, si me da pan para comer y ropa para vestirme, (Génesis 28, 20)

  • Luego se sentaron a comer. De pronto, alzaron la vista y divisaron una caravana de ismaelitas que venían de Galaad, transportando en sus camellos una carga de goma tragacanto, bálsamo y mirra, que llevaban a Egipto. (Génesis 37, 25)

  • Cuando también los egipcios y el pueblo sintieron hambre, y el pueblo pidió a gritos al Faraón que le diera de comer, este respondió: "Vayan a ver a José y hagan lo que él les diga". (Génesis 41, 55)


“Tenhamos sempre horror ao pecado mortal e nunca deixemos de caminhar na estrada da santa eternidade.” São Padre Pio de Pietrelcina