Encontrados 135 resultados para: Tampoco

  • aún no había ningún arbusto del campo sobre la tierra ni había brotado ninguna hierba, porque el Señor Dios no había hecho llover sobre la tierra. Tampoco había ningún hombre para cultivar el suelo, (Génesis 2, 5)

  • Cuando el Señor aspiró el aroma agradable, se dijo a sí mismo: "Nunca más volveré a maldecir el suelo por causa del hombre, porque los designios del corazón humano son malos desde su juventud; ni tampoco volveré a castigar a todos los seres vivientes, como acabo de hacerlo. (Génesis 8, 21)

  • Abrám dijo a Lot: "No quiero que haya altercados entre nosotros dos, ni tampoco entre tus pastores y los míos, porque somos hermanos. (Génesis 13, 8)

  • Porque ya hace dos años que hay hambre en esta región, y en los próximos cinco años tampoco se recogerán cosechas de los cultivos. (Génesis 45, 6)

  • Tampoco la comerán el huésped ni el mercenario. (Exodo 12, 45)

  • Tampoco subirás por gradas a mi altar, para que no se vea tu desnudez. (Exodo 20, 26)

  • Tampoco favorecerás arbitrariamente al pobre que está implicado en un pleito. (Exodo 23, 3)

  • Que nadie suba contigo ni se haga ver en toda la extensión de la montaña, y que tampoco el ganado se detenga a pastar delante de ella". (Exodo 34, 3)

  • Tampoco tomes a sus hijas como esposas de tus hijos, porque cuando ellas se prostituyan con sus dioses, harán que también ellos se prostituyan. (Exodo 34, 16)

  • Tampoco encenderán fuego en sus casas el día sábado. (Exodo 35, 3)

  • Y si tampoco dispone de medios suficientes para procurarse las dos torcazas o los dos pichones de paloma, llevará como ofrenda por su pecado la décima parte de una medida de harina de la mejor calidad, pero sin añadir aceite ni poner incienso sobre ella, porque es un sacrificio por el pecado. (Levítico 5, 11)

  • Tampoco comerán la sangre de ningún pájaro o de cualquier otro animal, cualquiera sea el lugar donde ustedes vivan. (Levítico 7, 26)


“E’ na dor que o amor se torna mais forte.” São Padre Pio de Pietrelcina