Encontrados 1809 resultados para: Ner
Entonces el Señor Dios modeló con arcilla del suelo a todos los animales del campo y a todos los pájaros del cielo, y los presentó al hombre para ver qué nombre les pondría. Porque cada ser viviente debía tener el nombre que le pusiera el hombre. (Génesis 2, 19)
Si obras bien podrás mantenerla erguida; si obras mal, el pecado está agazapado a la puerta y te acecha, pero tú debes dominarlo". (Génesis 4, 7)
Entonces el Señor dijo a Noé: "Entra en el arca, junto con toda tu familia, porque he visto que eres el único verdaderamente justo en medio de esta generación. (Génesis 7, 1)
En atención a ella, Abrám fue tratado deferentemente y llegó a tener ovejas, vacas, asnos, esclavos, sirvientas, asnas y camellos. (Génesis 12, 16)
Un fugitivo llevó la noticia a Abrám, el hebreo, que estaba acampado en el encinar de Mamré, el amorreo, hermano de Escol y de Aner; estos, a su vez, eran aliados de Abrám. (Génesis 14, 13)
No quiero nada para mí, fuera de lo que mis servidores han comido. Solamente los hombres que me han acompañado, Aner, Escol y Mamré, recibirán su parte". (Génesis 14, 24)
"Señor, respondió Abrám, ¿para qué me darás algo, si yo sigo sin tener hijos, y el heredero de mi casa será Eliezer de Damasco?". (Génesis 15, 2)
El Señor le respondió: "Tráeme una ternera, una cabra y un carnero, todos ellos de tres años, y también una tórtola y un pichón de paloma". (Génesis 15, 9)
Al ponerse el sol, Abrám cayó en un profundo sueño, y lo invadió un gran temor, una densa oscuridad. (Génesis 15, 12)
Sólo a la cuarta generación tus descendientes volverán aquí, porque hasta ahora no se ha colmado la iniquidad de los amorreos". (Génesis 15, 16)
Sarai dijo a Abrám: "Ya que el Señor me impide ser madre, únete a mi esclava. Tal vez por medio de ella podré tener hijos". Y Abrám accedió al deseo de Sarai. (Génesis 16, 2)
Abrám respondió a Sarai: "Puedes disponer de tu esclava. Trátala como mejor te parezca". Entonces Sarai la humilló de tal manera, que ella huyó de su presencia. (Génesis 16, 6)
