Encontrados 21 resultados para: Ajías

  • Ajías, hijo de Ajitub, hermano de Icabod, hijo de Pinjás, hijo de Elí, el sacerdote del Señor en Silo, llevaba el efod. La tropa tampoco sabía que Jonatán había partido. (I Samuel 14, 3)

  • Saúl dijo a Ajías: "Trae aquí el efod". Porque, en ese tiempo, era él quien llevaba el efod delante de Israel. (I Samuel 14, 18)

  • Elijoref y Ajías, hijos de Sisá, secretarios; Josafat, hijo de Ajilud, archivista; (I Reyes 4, 3)

  • En cierta ocasión, Jeroboám salió de Jerusalén y lo encontró en el camino el profeta Ajías, de Silo; este iba cubierto con un manto nuevo, y los dos estaban solos en el campo. (I Reyes 11, 29)

  • Ajías tomó el manto que llevaba encima y lo desgarró en doce pedazos. (I Reyes 11, 30)

  • Así el rey no escuchó al pueblo, porque ese era el medio de que se valía el Señor para cumplir la palabra que él había dicho a Jeroboám, hijo de Nebat, por boca de Ajías de Silo. (I Reyes 12, 15)

  • Entonces este dijo a su esposa: "Disfrázate para que nadie sepa que eres la mujer de Jeroboám, y ve a Silo. Allí habita Ajías, el profeta que predijo que yo reinaría sobre este pueblo. (I Reyes 14, 2)

  • Así lo hizo la mujer de Jeroboám: partió hacia Silo y entró en la casa de Ajías. Este ya no podía ver, porque había perdido la vista a causa de su vejez. (I Reyes 14, 4)

  • Apenas oyó el ruido de los pasos de la mujer, mientras ella entraba por la puerta, Ajías dijo: "Entra, mujer de Jeroboám. ¿Por qué te haces pasar por otra? Yo he sido enviado para hablarte duramente. (I Reyes 14, 6)

  • Lo sepultaron, y todo Israel se lamentó por él, conforme a la palabra que había dicho el Señor, por medio de su servidor, el profeta Ajías. (I Reyes 14, 18)

  • Basá, hijo de Ajías, de la casa de Isacar, conspiró contra él y lo ultimó en Guibetón, que pertenecía a los filisteos, cuando Nadab y todo Israel la estaban sitiando. (I Reyes 15, 27)

  • Apenas comenzó a reinar, masacró a toda la casa de Jeroboám, hasta exterminarla, sin dejar a nadie con vida, conforme a la palabra que había dicho el Señor por medio de su servidor Ajías de Silo. (I Reyes 15, 29)


“Se tanta atenção é dada aos bens desta Terra, quanto mais se deve dar aos do Céu? Faça, portanto, uma boa leitura espiritual, a santa meditação, o exame de consciência, e fará progresso na perfeição cristã e no amor de Jesus.” São Padre Pio de Pietrelcina