Encontrados 28 resultados para: secretario

  • Sadoc, hijo de Ajitub, y Abiatar, hijo de Aji melec, eran sacerdotes. Seraya era secretario. (2 Samuel 8, 17)

  • Adoram era inspector de impuestos, y Josafat, hijo de Ajilud, era archivero; Suya era secretario; (2 Samuel 20, 24)

  • Cuando veían que la caja estaba llena, un secretario del rey venía y, con el sumo sacerdote, la sacaban y contaban el dinero. (2 Reyes 12, 11)

  • El general pidió hablar con el rey. Este mandó como representante a su mayordomo Elyaquim, al secretario Sobna y al ministro Joaj, hijo de Asaf. (2 Reyes 18, 18)

  • Después de esto, Elyaquim, hijo de Helcías, mayordomo del palacio, el secretario Sobna y Joaj, hijo de Asaf, canciller, volvieron a Ezequías con sus vestiduras rasgadas y le contaron las palabras de Rabsaces. (2 Reyes 18, 37)

  • En el año dieciocho de su reinado, el rey Josías mandó a su secretario Safán, hijo de Asalía, hijo de Mesulán, a la Casa de Yavé, diciéndole: (2 Reyes 22, 3)

  • Al recibirlo, el sumo sacerdote Helquías dijo al secretario Safán: «He hallado el libro de la Ley en la Casa de Yavé.» Helquías entregó el libro a Safán, que lo leyó. (2 Reyes 22, 8)

  • y ordenó a Helquías, a Ajicam, a Acbor, al secretario Safán y a Asías, su ministro, lo siguiente: (2 Reyes 22, 12)

  • Tomó también a un funcionario de la ciudad que era inspector de los hombres de guerra, a cinco de los servidores del servicio doméstico del rey, que se encontraban en la ciudad, al secretario del jefe del ejército, encargado del alistamiento de los ciudadanos, y a sesenta ciudadanos más que se hallaban en la ciudad. (2 Reyes 25, 19)

  • Sivsa era secretario; Benaías, hijo de Jeovadá, mandaba a los cereteos y peleteos. Pero los hijos de David eran primeros al lado del rey. (1 Crónicas 18, 17)

  • Cuando llevaban la caja a los inspectores del rey, por medio de los levitas, si veían que había mucho dinero, venía el secretario del rey y el inspector del sumo sacerdote para vaciar la caja; luego la tomaban y volvían a su lugar. Así lo hacían cada día, y recogían dinero en abundancia. (2 Crónicas 24, 11)

  • Tomó la palabra y dijo al secretario Safán: «He encontrado el libro de la Ley en la Casa de Yavé»; y Helquías entregó el libro a Safán. (2 Crónicas 34, 15)


“Sejam como pequenas abelhas espirituais, que levam para sua colméia apenas mel e cera. Que, por meio de sua conversa, sua casa seja repleta de docilidade, paz, concórdia, humildade e piedade!” São Padre Pio de Pietrelcina