Encontrados 14 resultados para: quema

  • Le respondió: «Si se quema el corazón o el hígado del pez ante un hombre o mujer atormentados por un espíritu malo, el mal desaparece para siempre. (Tobías 6, 8)

  • Porque la raza del impío es estéril, y el fuego quema la tienda del soborno. (Job 15, 34)

  • Un calor sofocante evapora sus aguas y quema lo que queda de su trigo. (Job 24, 19)

  • Me rodeaban como avispas, cayeron como zarza que se quema, pues en nombre del Señor los humillé. (Salmos 118, 12)

  • La pasión que quema como un fuego ardiente no se apagará antes de ser satisfecha. El hombre que comete la impureza en su cuerpo no se detendrá hasta que ese fuego lo devore. Para el hombre impúdico cualquier satisfacción es buena, no se calmará hasta que muera. (Sirácides (Eclesiástico) 23, 17)

  • Al mediodía reseca el campo; ¿quién puede soportar su ardor? Aunque sea insoportable el calor de la fragua, el ardor del sol es tres veces más cuando quema las montañas, proyectando vapores ardientes, rayos que ciegan los ojos. (Sirácides (Eclesiástico) 43, 3)

  • El otro viento consume las montañas y quema el desierto; como si fuera fuego devora todo verdor. (Sirácides (Eclesiástico) 43, 21)

  • Pues su maldad arde como fuego, devora zarzas y espinas, y después quema la espesura del bosque, y todos ellos se disipan como se disipa el humo. (Isaías 9, 19)

  • y, al salir, verán los cadáveres de los hombres que se rebelaron contra mí. El gusano que los devora no morirá, y el fuego que los quema no se apagará, y todos se sentirán horrorizados al verlos. (Isaías 66, 24)

  • En ese tiempo dirán a este pueblo y a Jerusalén: «Un viento que quema y que no sirve para separar la paja del grano, sopla desde el desierto hacia la hija de mi pueblo.» (Jeremías 4, 11)

  • ¡Y bien, mi pueblo me ha olvidado y quema incienso a cosas que no valen nada! Lo han desviado de sus caminos, de sus viejos senderos, para tomar caminos horrorosos, rutas intransitables. (Jeremías 18, 15)

  • ¿No es mi palabra como fuego que quema o como martillo que rompe la roca? (Jeremías 23, 29)


“O temor e a confiança devem dar as mãos e proceder como irmãos. Se nos damos conta de que temos muito temor devemos recorrer à confiança. Se confiamos excessivamente devemos ter um pouco de temor”. São Padre Pio de Pietrelcina