Encontrados 14 resultados para: permanezca

  • Moisés les respondió: «No teman, pues Dios ha venido para probarlos; él quiere que su temor permanezca en ustedes y así no pequen.» (Exodo 20, 20)

  • Entonces tus días y los de tus hijos se prolongarán en la tierra que Yavé juró dar a tus padres, y permanecerás en ella mientras permanezca el cielo sobre la tierra. (Deuteronomio 11, 21)

  • «Ve y dile a mi siervo David: ¿Eres tú quien me construirá una casa para que yo permanezca en ella? (2 Samuel 7, 5)

  • y ahora te has dignado bendecir la casa de tu siervo para que permanezca por siempre en tu presencia. ¡Oh Yavé! Tú eres el que bendice y mi casa, pues, será bendita para siempre.» (1 Crónicas 17, 27)

  • pues ahora he escogido y santificado esta Casa, para que en ella permanezca mi Nombre para siempre. Allí estarán mis ojos y mi corazón todos los días. (2 Crónicas 7, 16)

  • Que su nombre permanezca para siempre, y perdure por siempre bajo el sol. En él serán benditas todas las razas de la tierra, le desearán felicidad todas las naciones. (Salmos 72, 17)

  • Yo he venido al mundo como luz, para que todo el que crea en mí no permanezca en tinieblas. (Evangelio según San Juan 12, 46)

  • Ustedes no me eligieron a mí; he sido yo quien los eligió a ustedes y los preparé para que vayan y den fruto, y ese fruto permanezca. Así es como el Padre les concederá todo lo que le pidan en mi Nombre. (Evangelio según San Juan 15, 16)

  • Jesús le contestó: «Si yo quiero que permanezca hasta mi vuelta, ¿a ti qué te importa? Tú sígueme.» (Evangelio según San Juan 21, 22)

  • Por esta razón corrió entre los hermanos el rumor de que aquel discípulo no iba a morir. Pero Jesús no dijo que no iba a morir, sino simplemente: «Si yo quiero que permanezca hasta mi vuelta, ¿a ti qué te importa?» (Evangelio según San Juan 21, 23)

  • Que cada uno, pues, permanezca en la situación en que estaba cuando fue llamado. (1º Carta a los Corintios 7, 20)

  • La gracia del Señor Jesús permanezca con ustedes. (1º Carta a los Corintios 16, 23)


“O Senhor sempre orienta e chama; mas não se quer segui-lo e responder-lhe, pois só se vê os próprios interesses. Às vezes, pelo fato de se ouvir sempre a Sua voz, ninguém mais se apercebe dela; mas o Senhor ilumina e chama. São os homens que se colocam na posição de não conseguir mais escutar.” São Padre Pio de Pietrelcina