Encontrados 217 resultados para: gracias

  • El Adán se unió a Eva, su mujer, la cual quedó embarazada y dio a luz a Caín. En esta oportunidad dijo: «Gracias a Yavé me conseguí un hijo.» (Génesis 4, 1)

  • Labán le contestó: «Hazme un favor. El cielo me hizo ver que Yavé me bendecía gracias a ti.» (Génesis 30, 27)

  • Yavé dijo a Moisés: «A ustedes no los escuchará Faraón, y gracias a esto serán más todavía mis prodigios en la tierra de Egipto.» (Exodo 11, 9)

  • Si se ofrece en acción de gracias, lo acompañan panes sin levadura amasados con aceite, tortas sin levadura untadas con aceite, y flor de harina amasada y sobada con aceite. (Levítico 7, 12)

  • Esta ofrenda se añadirá a los buñuelos de masa fermentada y a lo que se ofrece como sacrificio de comunión para dar gracias. (Levítico 7, 13)

  • Guarden mis tradiciones y mis decisiones, pues el que las cumpla vivirá gracias a ellas: ¡yo soy Yavé! (Levítico 18, 5)

  • Cuando ofrezcan un sacrificio de acción de gracias a Yavé, háganlo de manera que le agrade. (Levítico 22, 29)

  • El sacerdote hará la expiación ante Yavé por esa persona, y gracias a esa expiación, quedará perdonada. (Números 15, 28)

  • Todos quedaron satisfechos, y los israelitas dieron gracias a Yavé, olvidando su intención de combatirlos. (Josué 22, 33)

  • Les respondió el olivo: «¿Voy a renunciar al aceite con el que gracias a mí son honrados los dioses y los hombres, para ir a mecerme por encima de los árboles? » (Jueces 9, 9)

  • ¡Que, gracias a la descendencia que Yavé te concederá de esta joven, tu casa sea tan célebre como la de Peres, el hijo que Judá tuvo de Tamar!» (Rut 4, 12)

  • Pero, sobre todo, gracias a Dios, que me ha impedido hacerte mal. Pues si tú no te hubieras apresurado en venir a mi encuentro, juro que a Nabal no le habría quedado al amanecer ni un solo varón.» (1 Samuel 25, 34)


“Subamos sem nos cansarmos, sob a celeste vista do Salvador. Distanciemo-nos das afeições terrenas. Despojemo-nos do homem velho e vistamo-nos do homem novo. Aspiremos à felicidade que nos está reservada.” São Padre Pio de Pietrelcina