Encontrados 16 resultados para: Maquir

  • Alcanzó a ver a los hijos de Efraím hasta la tercera generación. También los hijos de Maquir, hijo de Manasés, nacieron sobre las rodillas de José. (Génesis 50, 23)

  • Entonces se acercaron las hijas de Selofjad, hijo de Jefer, hijo de Galaad, hijo de Maquir, hijo de Manasés, que fue hijo de José. Sus nombres eran: Majlá, Noá, Joglá, Milcá y Tirsá. (Números 27, 1)

  • Los jefes de familia del clan de Galaad, hijo de Maquir, hijo de Manasés, uno de los clanes de José, se acercaron y dijeron a Moisés ante los jefes de las familias israelitas. (Números 36, 1)

  • Lo que es a Maquir, le di parte de Galaad. (Deuteronomio 3, 15)

  • La mitad de Galaad, Astarot y Edreí, ciudades del reino de Og, fueron atribuidas a los hijos de Maquir, hijo de Manasés, es decir, la mitad de los hijos de Maquir, según el número de sus familias. (Josué 13, 31)

  • La porción que tocó por suerte a la tribu de Manasés (primogénito de José), fue atribuida a Maquir, primogénito de Manasés y padre de Galaad, pues era un valiente. (Josué 17, 1)

  • Selofjad, hijo de Jefer, hijo de Galaad, hijo de Maquir, hijo de Manasés, no tenía hijos, sino solamente hijas, cuyos nombres son: Majlá, Noá, Joglá, Milcá y Tirsá. (Josué 17, 3)

  • «¿Dónde está?», preguntó el rey. Y Sibá respondió: «Está en casa de Maquir, hijo de Am miel, en Lodabar.» (2 Samuel 9, 4)

  • David mandó a buscarlo a la casa de Maquir. (2 Samuel 9, 5)

  • En cuanto llegó David a Majanaím, Sobí, del pueblo de Rabbat-Amón, junto con Maquir, del pueblo de Lodebar y Barzilay, el galaadita de Roguelim, (2 Samuel 17, 27)

  • Después se unió Hesrón a la hija de Maquir, padre de Galaad. Tenía él sesenta años cuando la tomó por mujer y le dio a luz a Segub. (1 Crónicas 2, 21)

  • Pero los guesuritas y los arameos se apoderaron de las aldeas de Jaír, con Quenat y sus campamentos: sesenta ciudades. Todos éstos son los hijos de Maquir, padre de Galaad. (1 Crónicas 2, 23)


“Ele e ouvir a Sua voz por meio das Suas inspirações e iluminações interiores.” São Padre Pio de Pietrelcina