10. El macho cabrío sobre el cual haya caído la suerte para Azazel, será llevado vivo delante de Yavé, harán sobre él el rito de expiación y lo echarán al desierto, hacia Azazel.





“A divina bondade não só não rejeita as almas arrependidas, como também vai em busca das almas teimosas”. São Padre Pio de Pietrelcina