26. Tus sacerdotes han menospreciado mi ley y profanado lo que me está consagrado, no han distinguido entre lo que es santo y lo que es profano. No han mostrado la diferencia entre lo impuro y lo puro; han ignorado mis sábados y entre ellos me he sentido deshonrado.





“O mais belo Credo é o que se pronuncia no escuro, no sacrifício, com esforço”. São Padre Pio de Pietrelcina