23. Pues todos sus días han sido penosos, a tal punto que perdía el sueño y aún de noche su corazón no descansaba. Eso es algo que no tiene sentido.





“Sejam como pequenas abelhas espirituais, que levam para sua colméia apenas mel e cera. Que, por meio de sua conversa, sua casa seja repleta de docilidade, paz, concórdia, humildade e piedade!” São Padre Pio de Pietrelcina