3. Ajab, rey de Israel, dijo a Josafat, rey de Judá: «¿Quieres marchar conmigo contra Ramot de Galaad?» Le contestó: «Somos uno solo yo y tú. Tanto mi pueblo como el tuyo estaremos contigo en la batalla.»





“Tenhamos sempre horror ao pecado mortal e nunca deixemos de caminhar na estrada da santa eternidade.” São Padre Pio de Pietrelcina